La tendencia a utilizar los techos como un jardín está en auge porque ofrece múltiples ventajas desde el punto de vista paisajístico y de la sostenibilidad del edificio disminuyendo los costos de Energía.
Son muchas las edificaciones que quieren ser verdes, del mismo modo la cantidad de certificaciones que confirman que la sustentabilidad es una tendencia que en las ciudades está en mayor crecimiento.
Vestir las edificaciones de un techo verde se ha vuelto un uso común, es más los edificios ya construidos desde años atrás pueden convertirse en Azoteas Verdes de una manera fácil, gracias a que cada día se muestran proyectos, diseños y creaciones que acentúan esta nueva forma de edificación.
¿Qué es una Azotea Verde?
Una Azotea Verde es el techo de un edificio o de cualquier inmueble, que está parcial o totalmente cubierto de vegetación, ya sea en suelo o en un medio de cultivo apropiado.
No se refiere a techos de color verde, como los de tejas de dicho color ni tampoco a techos con jardines en macetas.
Se refiere en cambio a tecnologías usadas en los techos para mejorar el hábitat o ahorrar consumo de energía, es decir tecnologías que cumplen una función ecológica.
Ventajas de las Azoteas Verdes
Las ventajas de las Azoteas Verdes en edificios urbanos son variadas.
Quizás lo que primero se valora es el aumento de la calidad ambiental de un espacio dotado de plantas herbáceas y especies arbustivas y también la capacidad de estos elementos como sumideros de CO2, incremento de la biodiversidad urbana, captación de polvo y contaminantes, etc.
Sin embargo, quizás el valor más destacado sea, que las cubiertas verdes actúan a lo largo del año como verdaderos amortiguadores térmicos y por ende, del consumo Energético.
Ahorro Energético
Una Azotea Verde bien diseñada y construida, genera un incremento en el aislamiento térmico de los terrados, de las partes externas de los edificios, que generalmente son zonas con una elevada inercia térmica.
Las cubiertas verdes suponen un ahorro en cuanto a demanda de climatización, tanto en verano como en invierno, ya que amortigua y regula los flujos de calor, sobre todo entre el exterior y el interior de los edificios.
En invierno, evita fugas de calor hacia el exterior por conducción desde la parte más caliente de las habitaciones, que es siempre el techo y, durante el verano, esta resistencia también dificulta la transmisión de energía.
Instalación de Azoteas Verdes como buena decisión
Construir un techo verde implica un ahorro de energía para los edificios y para todo el planeta, es una decisión de ahorrar y mejorar la calidad del aire, porque las plantas absorben el dióxido de carbono y emiten oxígeno.
Pues las cubiertas verdes ahorran energía en concepto de climatización, tanto en verano como en invierno.
Este ahorro de energía va directo en los edificios, además, lleva asociado un ahorro en emisiones de CO2.
Por lo tanto utilizar estas estructuras conlleva un beneficio ambiental de gran magnitud.